En un comunicado, dado a conocer por la Asociación del Personal de Dirección de Ferrocarriles y Puertos Argentinos (APDFA), la organización sindical manifiesta que «en los escandalosos casos de corrupción y desmanejos en la Administración General de Puertos, que están apareciendo en distintos medios periodísticos, en nada involucran a nuestro sindicato».
Recordemos que en el programa «La ves ???» que conduce el periodista Jonatan Viale y que se emite por la señal de noticias TN, la periodista Guadalupe Vázquez, presenta una investigación, con documentos exclusivos, sobre hechos que cuanto menos se pueden tipificar como malversación de fondos públicos y varios de ellos vinculados a la corrupción.
Entre ellos se destacaron denuncias que ya se habían hecho públicas desde este portal, como el alquiler del edificio de Puerto Madero, en 90 mil dólares mensuales, o el acuerdo con Buquebus S.A. que derivó en pérdidas millonarias para la empresa.
La periodista incorpora a la lista de hechos la construcción de un «museo» del puerto de Buenos Aires con un costo de más de 5 mil millones de pesos, de los cuales ya se saldo más de 1.5 mil millones de pesos sin «Certificados de Obras» y cuando informes internos dan cuenta que solo se ha avanzado en un 6 %.
Una empresa que daba superávit en forma constante, el año pasado pedía una autorización y aporte económico, al Ministerio de Economía, por más de 1.700 millones de pesos para asistir un déficit financiero de la Sociedad de Estado, cuando en el año 2022 había arrojado un superávit de 38 millones de dólares, a pesar de habérsele trasladado la potestad de administración de la Hidrovia Paraná-Paraguay y el cobro del peaje de la misma.
En su comunicado APDFA manifiesta que en «estos impúdicos hechos que vinculan a «dirigentes sindicales», debemos recordar que los mismos (Leonardo y Diego Salon) hace tiempo que ya no pertenecen a la organización«.
El Sindicato conducido por el Ingeniero Adrián Silva, da cuenta que «por una serie de inconductas e inmoralidades juzgadas por nuestro Tribunal de Ética, el mismo resolvió la EXPULSIÓN de los HERMANOS SALOM, quienes a pesar del cambio de gobierno continuaron teniendo gran influencia en las decisiones del sector portuario y específicamente en la AGP«.
Según la denuncia de la periodista Guadalupe Vázquez «Parte fundamental de ese polémico y persistente engranaje son los hermanos Salom, Diego y Leonardo, sobrinos del histórico líder sindicalista Alberto Salom, con nexos con Gustavo “El Turco” Elías, presunto testaferro de Hugo Moyano, investigado por la justicia por lavado de dinero, y con supuestos fuertes lazos con el exministro de Economía, Sergio Massa. Los hermanos Salom, cuando perdieron las elecciones en uno de los tres gremios portuarios, APDFA, inventaron el suyo propio: Unión Personal Superior Ferroviario (UPDF). Diego Salom, actual Director de Planificación Estratégica de la AGP está de los dos lados del mostrador: ocupa un cargo jerárquico y a la vez es líder sindical. Su hermano, Leonardo Salom, dirige el puerto de Dock Sud y la mutual AMEPORT, además de la “Fundación Mundo Puerto”, que a pesar de su nombre está registrada como empresa, de la que es tesorera la propia gerente general de la AGP, Verónica Piñero, y que curiosamente fija domicilio en Viamonte 723 de la ciudad de Buenos Aires, misma dirección -aunque distinto piso- que Global Gate SRL, una empresa de tecnología que este año ganó una compulsa abreviada por US$7 mil en la adquisición de licencias Fortinet UTP”.
Según fuentes del sector, los hermanos Salom, quienes tienen una gran influencia en la AGP y estrecha relación con Massa, experimentaron en los últimos años una llamativa mejora en su nivel de vida, lo que se ve reflejado, por ejemplo, en el uso de autos de alta gama y exclusivos viajes alrededor del mundo. El sueldo bruto de Diego Salom en la AGP es de $5.728.143 pesos.
Para finalizar, se destaca que «APDFA viene logrando cerca de 20 fallos judiciales de reincorporación de trabajadores de carrera ilegalmente despedidos en AGP a principios de este año, despidos arbitrarios que produjera un importante costo económico para la empresa, y que estuvo claramente dirigido a dirigentes y afiliados de APDFA que enfrentaron los desmanejos de estos personajes que desprestigian a la actividad sindical, defendiendo la necesaria eficiencia en la gestión empresarial frente a estos espurios individuos«.