La Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires (ARBA) decidió aumentar en un 127% el umbral de facturación para que las empresas deban actuar como agentes de percepción y retención del fisco. Esta medida beneficiará a unas 3.323 pymes que, al superar el nuevo límite, quedarán exentas de esta obligación que representa una carga administrativa y económica considerable.

El anuncio fue realizado por Cristian Girard, director ejecutivo de ARBA, tras una reunión de gabinete encabezada por el gobernador Axel Kicillof. Según la nueva normativa, las empresas que superen los 2.800 millones de pesos en ingresos operativos durante 2024 deberán cumplir con la obligación de actuar como agentes de recaudación bajo el régimen general, mientras que aquellas que no lleguen a esa cifra quedarán fuera de esta obligación.
No obstante, según reza la Resolución Normativa 4/25, existen algunas excepciones específicas: las empresas cuyo rubro principal sea la venta de combustibles líquidos derivados del petróleo tendrán un umbral elevado a 4.200 millones de pesos. En tanto, aquellas pymes dedicadas a la venta de cosas muebles deberán superar los 1.400 millones de pesos para ser incluidas en la medida.

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En ese marco, Girard explicó que este aumento progresivo de los montos de facturación tiene como objetivo reducir la carga administrativa de las empresas, especialmente en el sector productivo. “Desde que asumimos, hemos actualizado de manera progresiva los montos de facturación, lo que ha aliviado financieramente al sector”, afirmó.
Además, el titular de ARBA también recordó que este ajuste del 127% es parte de una política fiscal sostenida que comenzó la administración provincial en 2020. Desde entonces, el límite de facturación ha sido incrementado en varias etapas: un 175% antes de la pandemia, seguido por aumentos del 36% en 2021, 66% en 2022, 100% en 2023 y 150% en 2024.