Desde la Asociación Argentina de Capitanes, Pilotos y Patrones de Pesca (A.A.C.P. y P.P.), emitieron un comunicado donde manifiestan que «vemos con preocupación que se estigmatice públicamente una de las actividades de la pesca industrial argentina, de mayor selectividad de captura entre las que se practican en el Mar Argentino».
Capturar calamar con el sistema de “poteras” es, sin discusión, 100 % de pesca sobre la especie objetivo, y es ésta una de las explotaciones pesqueras que cuenta con una seria mirada desde las autoridades de contralor.
Recientemente, nos ha hecho llegar un asociado que se encuentra en plena faena de pesca, su sentida opinión respecto de las publicaciones que circulan en medios y redes mostrando el descarte de calamar en buques poteros, opinión que a continuación transcribimos en forma textual:
“Como capitán de buque potero de pabellón nacional operando en pesca de calamar illex argentino en la ZEE, quisiera dejar en claro que las capturas que se han dado desde el inicio de la campaña de pesca 2023 son de tallas de entre 150 a 270 grs., es decir tallas perfectamente comerciales, y se efectúan capturas que pudieran ser congeladas y con valor comercial, que siendo esta pesca la más selectiva de todas, y por el trabajo que se realiza, es fundamental que si alguien tienen conocimiento de que en algún buque se desperdicia la pesca, debe decirlo con nombre del barco y hacerse cargo de la denuncia, ya que las declaraciones de que “todos” los poteros hacen tal o cual cosa, es agraviante para los profesionales que efectuamos esta pesca en el Mar Argentino”.
No puede esta Asociación de trabajadores llamarse a silencio ante estas generalizadoras publicaciones, cuando en el año 2016 deliberadamente abordamos la problemática del descarte pesquero con absoluta seriedad y responsabilidad, al punto de haber producido la película DESCARTE CERO y, posteriormente, publicado el libro “Civilización y Barbarie en el Mar Argentino”, abordando dicha problemática y fijando posición, asumiendo responsabilidades y proponiendo visibilizar los aspectos negativos, no solo en los buques pesqueros sino en los aspectos estructurales como la renovación y modernización de la flota, para la seguridad náutica, para el mejor procesamiento de alimento capturado y la educación, formación y capacitación del recurso humano con alcance a los funcionarios, empresarios y trabajadores.
Entendemos claramente que ante la explotación de un recurso natural que habita en un ambiente hostil como es el mar, los cambios no solo deben ser de carácter económico y tecnológico sino fundamentalmente intelectuales, y es en este punto donde sostenemos que no se puede generalizar el hecho que un “accidente o error” producido en uno o algunos buques, se instale en la sociedad como algo que ocurre en toda la flota potera.
En el seminario-taller realizado en la Escuela Nacional de Pesca sostuvimos que se debería discutir la “refundación de la industria”, con la mirada puesta en el bienestar nutricional, económico y social sostenible, en la búsqueda de una nueva forma de seguir pescado y defendiendo la producción y el trabajo en tierra. Debiendo darse cumplimiento asimismo con la infinidad de recomendaciones y regulaciones de organismos nacionales e internacionales como la FAO, la OIT, la OMI, etc.
Continuamos diciendo que habrá que analizar todas las variables, atentos a los aventureros que buscan ventajas individuales. Claramente debe terminar el desaprovechamiento de un recurso que es alimento directo y que el mundo necesita, debiendo redoblarse los esfuerzos para generar las transformaciones que no signifiquen solo el final de un sistema de producción, sino el inicio de uno nuevo. Cargar sobre los trabajadores la responsabilidad de dar solución al desperdicio de alimentos es simplemente “un gris oportunismo”, basado en segundas intenciones y mucho desconocimiento.
El buque denunciado públicamente por «tirar calamar» arribó a puerto con bodega incompleta
Consultado acerca de las acusaciones de descarte de calamar realizadas por un buque potero, difundidas a través redes sociales y algún medio de prensa, el Secretario General Jorge Frías se refirió a lo expresado días atrás mediante un comunicado de esta Asociación, y destacó la reacción de la autoridad pesquera nacional ordenando la inspección de la embarcación a su arribo a puerto.
Difusiones de este tipo no resultan sanas para la actividad. «Nosotros dependemos de una industria que hay que atender y cuidar». Desde la Asociación a través de un comunicado «hemos hecho un arduo trabajo respecto de poner foco en la conservación a través de minimizar el descarte.
Nosotros somos una asociación de trabajadores, no somos actores que podamos definir la política de pesca en Argentina, pero fijamos posición y estamos predispuestos a hacer lo que esté a nuestro alcance para poder morigerar esto y aprovechar el recurso, que no es ni más ni menos que alimento. Al sostener versiones que no se fundamentan, ciertas publicaciones afectan a la industria.
Si alguien tiene pruebas efectivamente hay que denunciarlo, y la autoridad de contralor deberá actuar en consecuencia, pero cuando se dice ligeramente que se está tirando calamar, que es una especie que se captura con un arte de pesca que es de los más selectivos que se conocen en el Mar Argentino, y después no se demuestra con certeza, afecta a toda la industria, una industria de la cual dependen hasta cien mil personas porque extraemos un producto que se exporta, el mundo ve esto, y comercialmente nos vemos afectados.
El propio Subsecretario de Pesca informó que en las inspecciones realizadas al potero no se pudo comprobar ningún tipo de infracción respecto de esa denuncia, sino que el buque tenía parte de su bodega incompleta, con lo cual es ilógico pensar que un capitán y su tripulación tiren, descarten la captura cuando no completaron la bodega; y parte de la inspección que se hizo cuenta con las declaraciones de la tripulación y ninguno dio cuenta de ello.