El Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica prevé crear 3100 puestos de trabajo e incrementar la competitividad de la industria en un 15 %.
Las promesas del Gobierno de impulsar la actividad de la construcción naval en España a través de los fondos de recuperación Next Generation se han materializado a través del esperado PERTE –Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica– para el sector, aprobado por el Consejo de Ministros.
Con una inversión inicial de 1460 millones de euros, de los cuales el Gobierno aportará 1150 millones y el sector privado movilizará otros 310, el PERTE se lanza con el objetivo de modernizar la industria, avanzar en la transformación de la cadena de valor mediante su diversificación hacia las energías renovables marinas y los buques de bajas emisiones, afrontar la su digitalización, mejorar su sostenibilidad medioambiental y la capacitación de sus empleados.
Como resultado de esta inversión, se espera que el PERTE permita incrementar la competitividad del sector en alrededor de un 15 %, consiguiendo una tasa de crecimiento anual del 9 por ciento para el sector.
En términos de empleo, se espera un impacto positivo de 3100 nuevos puestos de trabajo «de calidad». En rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la Ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, aseguró que el PERTE es una muestra del “compromiso del Gobierno con el impulso de la industria naval española, un sector estratégico para contribuir a la autonomía industrial de España y Europa y potenciar su diversificación y su desarrollo sostenible, tecnológico y digital”.
“Nuestro objetivo es generar importantes retornos económicos y sociales, así como reforzar las capacidades industriales de nuestro país, contribuir al desarrollo tecnológico y digital del sector naval y a la generación de empleo cualificado y de calidad”, dijo Maroto.
A partir de un modelo de colaboración público-privado, el PERTE se concibe como una iniciativa integral sobre la transformación de la cadena de valor de la industria naval que se llevará a cabo mediante su diversificación, digitalización y sostenibilidad, con los siguientes objetivos, indica el Ministerio de Industria.
En este sentido se aspira a mantener la aportación de este sector a la soberanía industrial; diversificar la actividad hacia las energías renovables marinas; digitalizar la cadena de valor; incrementar la sostenibilidad medioambiental y mejorar la formación y capacitación de los empleados.
A través de este PERTE se impulsarán “proyectos transformadores” de la cadena de valor del sector naval. En concreto habrá una línea de ayudas de “actuación integral” para la modernización y diversificación del sector naval, de carácter plurianual, gestionada por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, cuyo objeto será la concesión de préstamos con un tramo no reembolsable (ayuda en forma mixta de préstamo y subvención). Para acceder a estas ayudas, astilleros y empresas auxiliares deben plantear al menos una actuación o proyecto primario que acredite el desarrollo de cada uno de los bloques de carácter obligatorio que componen la línea de ayudas: diversificación (innovación en la cadena de valor), digitalización (transformación digital de la cadena) y sostenibilidad (economía circular, eficiencia energética y mejora medioambiental). Además, se contempla el lanzamiento de un plan transversal de formación y reciclaje profesional.
Un segundo ámbito de actuación será el de las medidas facilitadoras, complementarias a los proyectos transformadores, que apoyarán las acciones de diversificación del sector naval hacia las energías renovables marinas y los buques de bajas emisiones, la mejora de la competitividad y la sostenibilidad del mismo.