El Aviso ARA Alférez Sobral recibió impactos de artillería y terminó en el fondo del mar; el mal estado de conservación y los altos costos para recuperarlo frustraron las propuestas de asociaciones civiles para convertirlo en museo.

“Lo que no pudo lograr Gran Bretaña, al atacar con misiles el ARA Aviso Alférez Sobral, en una ofensiva que le costó la vida a su comandante y a otros siete tripulantes, lo terminamos de concretar nosotros”, lamentó un veterano de guerra, al confirmarse que la Armada hundió el buque argentino en un ejercicio naval.
El barco, desactivado desde 2018, se encontraba en pésimo estado de conservación y había sufrido el desguace de varias piezas, lo que llevó a la Armada a tomar la drástica decisión, resistida por varias asociaciones de excombatientes.
“El Aviso ARA Alférez Sobral fue finalmente hundido, en la tarde del miércoles, por tiro de artillería naval en una etapa de adiestramiento de unidades de la flota de mar.”, informó la Armada, ante una consulta de este diario. No se distribuyeron fotografías de ese momento trascendente.
Ese mismo miércoles, El diario La Nación había informado que por los altos costos no prosperaron los intentos de algunas entidades civiles para rescatar el buque y convertirlo en museo, como pretendía la Asociación de Excombatientes de Malvinas de Santa Fe.
El Aviso ARA Alférez Sobral peleó en Malvinas y su comandante, el capitán de fragata Sergio Raúl Gómez Roca, murió en combate, al igual que otros siete tripulantes.
«Como los cobardes, todo se hizo a escondidas, sin aviso previo y sin registros públicos filmicos ni fotograficos del hundimiento»
Desde 2018, el buque se encontraba amarrado en la Base Naval Mar del Plata, hasta que el lunes último abandonó ese lugar para ser trasladado hacia su último destino. También fue retirada la corbeta clase A-69 ARA Drummond, aunque no se informó qué suerte correrá este buque.
Consultados por el diario La Naciòn Adolfo Schweighofer, veterano de Malvinas y presidente del Centro de Excombatientes de Santa Fe explicò “Tenía el boleto picado. Nosotros hicimos una propuesta para rescatarlo. Pero cuando fuimos a recorrer el buque en la Base Naval Mar del Plata vimos que su estado era calamitoso. Había que invertir cientos de miles de dólares para ponerlo en condiciones y poder trasladarlo”,
Este grupo de veteranos de Malvinas intentó el rescate del buque, movido por un “impulso patriótico”, junto con Owen Crippa, piloto de la Aviación Naval retirado y miembro de la comisión directiva de esa entidad, que también peleó en Malvinas.

El ARA Alférez Sobral en su regreso de Malvinas al continente, con su puente de mando destruido por el ataque británico, en mayo de 1982
La historia del Aviso ARA Alférez Sobral quedó profundamente ligada a la Guerra de Malvinas. El 3 de mayo de 1982, al mando del capitán Gómez Roca, fue enviada para rescatar a dos pilotos de la Fuerza Aérea cuyo avión había sido derribado.
Construido en el astillero Levinsgtone Shipbuilding, de Orange, el buque perteneció a la Armada de Estados Unidos y fue comprado por la Argentina en febrero de 1972. Estallada la Guerra de Malvinas, fue destacado en Río Gallegos y, tras el derribo de un avión Camberra de la Fuerza Aérea, a 100 millas náuticas (185 km) al norte del Estrecho de San Carlos, el ARA Alférez Sobral fue asignado a la búsqueda y rescate de los dos tripulantes de la aeronave.
«No se entiende como la propia fuerza – La Armada Argentina – le haya faltado el respeto a sus ex conbatientes y lo que es peor al capitán de fragata Sergio Raúl Gómez Roca que diò su vida en ese Aviso»
Un helicóptero británico sobrevoló el ARA Alférez Sobral y abrió fuego, con dos misiles que impactaron en la lancha del buque e hirieron a varios tripulantes. El capitán Gómez Roca ordenó desalojar los sectores más expuestos y él mismo permaneció en el puente de comando, con la tripulación indispensable. Allí se produjo el ataque fatal de los británicos.
El puente de comando original, donde cayó el comandante, se exhibe desde hace un tiempo en el Museo Naval de Tigre.
El Sobral siguió el mismo camino que el destructor ARA Piedrabuena, que también participó en la Guerra de Malvinas y fue convertido por la Armada en “blanco naval”. El 6 de noviembre de 1988 fue hundido, luego de ser remolcado, curiosamente, por el Aviso ARA Alférez Sobral, durante un ejercicio naval.
