La casta avanza: el plan perfecto en la licitación de la hidrovía

Por Paola Batista – Titular Puls Media – El Ministerio de Economía ha lanzado una licitación pública nacional e internacional para la concesión de obras en la Vía Navegable Troncal, con el objetivo de modernizar, mantener y operar este corredor estratégico del comercio exterior argentino. La medida incluye tareas de dragado, balizamiento y control hidrológico que buscan mejorar la competitividad y la sostenibilidad de esta arteria fluvial clave.

La Vía Navegable Troncal (VNT) conecta las principales provincias exportadoras con los mercados internacionales a través del Río Paraná y el Río de la Plata, transportando gran parte de la producción agrícola del país. Asimismo, desempeña un papel clave en el comercio exterior de la región conectando a los países del MERCOSUR con los mercados internacionales, facilitando la salida de productos como granos, minerales y combustibles desde Paraguay, Bolivia, Brasil y Uruguay.

La zona a licitar va desde el kilómetro 1238 del Río Paraná (Confluencia) hasta la zona de aguas profundas del Río de la Plata exterior, incluyendo tareas de dragado, redragado y señalización.

La publicación de pliegos y especificaciones técnicas está en la plataforma oficial CONTRAT.AR y en DGMarket para atraer ofertas nacionales e internacionales. El cierre de presentación de ofertas será el 29 de enero de 2025 y la evaluación de las propuestas estará a cargo de una Comisión Evaluadora ya designada.

De acuerdo con el comunicado el proceso fue diseñado con aportes de diversos actores del sector, coordinados a través de la «Mesa de Diálogo Interdisciplinaria para el Desarrollo Fluvial», un espacio que integró a representantes gubernamentales, privados y regionales. Esto resulta inexacto. Si bien algunas personas del sector fueron invitadas a tomar un café, nunca participaron de esa democrática mesa que se hace mención. También informan que la Administración General de Puertos (AGP) colaboró en la redacción de pliegos y estándares técnicos. Nuevamente resulta inexacto ya que la AGP fue la única responsable de la confección de los pliegos. Lo peor de la casta, volvió a hacer de las suyas.

El Presidente Milei se equivocó

Es sabido que la Hidrovía no suele ser una prioridad para los presidentes, y Milei no parece ser la excepción. La mayoría de los presidentes han hecho papelones en los nombramientos de sus funcionarios para el área, pero afortunadamente existió una licitación que funcionó muy bien casi hasta su final, en una suerte de piloto automático y sin los organismos estatales de contralor, desde 1995 hasta 2021. Cabe destacar que existieron algunas gestiones de gobierno con personal idóneo y acciones puntuales de gestión en esta área. Prueba de ello es que nunca hubo que lamentar un accidente de envergadura. Este mérito podría atribuirse también a la pericia e idoneidad de los prácticos, quienes no solo garantizan operaciones seguras, sino que también reportan problemas técnicos en tiempo real para su resolución. Es relevante recordar que el Ministro Sturzenegger no cedió a la presión de los lobistas cerealeros de Rosario en su intento por eliminar la actividad de practicaje.

La AGP es la figura clave en este proceso licitatorio. En los últimos años, la empresa estatal ha estado implicada en múltiples actos de corrupción y manejos poco transparentes, lo que pone en cuestión su capacidad para garantizar un proceso limpio y eficiente.

Más que un CV, un prontuario

Durante la presidencia de Alberto Fernández, concentrado en la búsqueda de amantes en las redes sociales a las que luego les ofrecía trabajos en el Estado, delegó en el kirchnerista-schiavista José Beni, la conducción de la AGP. Bajo su gestión, la sociedad estatal pasó de ser autosustentable a ser deficitaria en apenas dos años.

A pesar de estos resultados en agosto de 2021, el Decreto 556/2021 premió a la cuestionada administración de la AGP otorgándole el control del peaje y la contratación de servicios de dragado y balizamiento de la hidrovía. En una contratación directa los trabajos recayeron en las mismas dos empresas que lo hicieron durante la licitación entre 1995 y 2021:  Emepa encargada del balizamiento y Jan de Nul del dragado.

La llegada de dólares frescos en pleno contexto de restricciones cambiaria, se convirtieron en una irresistible adicción para la estructura kichnerista que los consumió desenfrenadamente. Durante 2022 y 2023, bajo la supervisión del Ministro de Economía y candidato presidencial Sergio Massa, el déficit de la AGP no solo se profundizó sino que las auditorías internas no lograron justificar cómo un negocio altamente rentable en manos privadas se volvió deficitario en manos estatales.

Otro antecedente que merece especial atención dentro del contexto actual, es el escandaloso llamado a Licitación para la VNT realizado 2022. Este proceso, anulado por denuncias de corrupción, tuvo como principales responsables a la AGP y a funcionarios que, lejos de rendir cuentas en la justicia, hoy ocupan otros cargos y están detrás del nuevo pliego. Ni siquiera la tibia recomendación de la Procuraduría de Investigaciones Administrativas –PIA-  de buscar un funcionario más idóneo logró frenar esta trama que parece blindada contra las consecuencias.

Una fórmula que no cierra: casta para descastar

Javier Milei triunfó en las elecciones presidenciales prometiendo acabar con la “casta”, pero su mandato parece haber tomado otro rumbo. A pesar de contar con pruebas suficientes para iniciar procesos judiciales contra funcionarios y funcionarias de la AGP, el presidente permitió que este organismo corrupto siga operando como hasta ahora. Una contradicción con su discurso anti casta, especialmente cuando la corrupción en la AGP ha sido inclusiva y transversal.

El presidente lejos de recurrir a expertos del Pro o a sus asesores u otros equipos técnicos, eligió la peor opción. Por otra parte la AGP es un organismo para aplicar su famosa motosierra:  con aproximadamente 550 empleados, expertos locales e internacionales coinciden en que podría operar eficientemente con apenas 10 o 20 personas, incluso considerando las tareas de cobro de peaje y mantenimiento de la hidrovía.

Sin embargo, los mismos delincuentes que deberían haber sido investigados lograron una jugada maestra, todo bajo la mirada del Ministro de Economía, Luis Caputo. Allegados aseguran que Caputo no es fácil de engañar… ¿o sí? ¿O quizás no fue engañado? La AGP presentó un pliego tan evidentemente direccionado hacia la empresa belga Jan de Nul que se anticipa una avalancha de medidas cautelares en los juzgados.

Lo verdaderamente maquiavélico del plan es que, incluso con las cautelares, la AGP siempre gana. Si estas prosperan, perpetúan el statu quo; si no lo hacen y el proceso licitatorio avanza, el pliego está diseñado para que el único ganador sea Jan de Nul, el elegido por la AGP.

Por Paola Batista – Titular Puls Media