El Gobierno británico asegura que el acuerdo no implica un aumento de las capturas del sector comunitario en sus caladeros. Decepción entre la flota británica por el nuevo acuerdo con Europa.

La Unión Europea y Reino Unido disipan las dudas sobre el futuro de su relación pesquera más allá de junio de 2026, cuando expira el actual acuerdo post-brexit para el acceso recíproco a sus aguas. Horas antes de la celebración de la primera cumbre EU-Reino Unido, en Londres, ambas partes han logrado cerrar un primer acuerdo que reafirma los compromisos existentes en materia pesquera, así como en seguridad marítima, y que garantizará la estabilidad del sector durante 12 años más, hasta el 30 de junio de 2038.
Este compromiso representa un paso fundamental para afianzar las relaciones pesqueras, estableciendo un marco estable para pescadores tanto de la Unión Europea como del Reino Unido y con el objetivo prioritario de proteger la sostenibilidad de los recursos marinos compartidos.
A falta de conocer los detalles del acuerdo y sin valoraciones adicionales por parte de la Comisión, desde el Gobierno británico destacan que el nuevo pacto protege el acceso, los derechos y las áreas de pesca británicas durante doce años, “sin aumentar la cantidad de capturas permitidas a los buques de la UE en aguas británicas”.

Esta medida, asegura, aporta estabilidad y certidumbre para el sector. Además, el Reino Unido ha trasladado compromiso a invertir 360 millones de libras en la modernización de la flota pesquera, incluyendo nuevas tecnologías y equipos, formación para mejorar las habilidades de la mano de obra, y financiación para revitalizar las comunidades costeras, apoyar el turismo y fomentar las exportaciones de productos del mar.
El acuerdo también permitirá que la flota británica se beneficie del convenio sanitario y fitosanitario (SPS), que reducirá costes y burocracia, facilitando las exportaciones, ha recordado Londres. El Gobierno británico ha reafirmado que este acuerdo cumple con las “líneas rojas” establecidas en su programa electoral: “no hay vuelta al mercado único, no retorno a la unión aduanera, ni tampoco a la libre circulación de personas”.
Además del sector pesquero, hay que tener en cuenta que el acuerdo acuerdo fortalece la cooperación en seguridad marítima, incluyendo medidas para mejorar la seguridad en barcos e infraestructuras portuarias conforme al Código Internacional para la Seguridad de los Buques y de las Instalaciones Portuarias (ISPS), así como la colaboración en ciberseguridad marítima y el desarrollo de tecnologías para embarcaciones autónomas. La cooperación se extenderá también al intercambio mutuo de informes sobre accidentes marítimos y a la intensificación del trabajo conjunto en la Organización Marítima Internacional.

«Hemos perdido la mejor oportunidad que teníamos para crecer»
La satisfacción mostrada por la flota europea tras la confirmación de que la Comisión Europea y el Reino Unido prolongarán hasta 2038 su relación pesquera, garantizando el acceso recíproco a sus aguas más allá de 2026, contrasta con el rechazo expresado por el sector británico. La Organización Nacional de Pescadores del Reino Unido (NFFO, por sus siglas en inglés) se ha mostrado especialmente crítica con el acuerdo.
“El otorgar a la UE doce años de acceso garantizado a nuestras aguas, hasta el límite costero de seis millas, supone entregar la mejor carta que aún conservábamos en las negociaciones pesqueras con Europa”, denunció la NFFO. “Se ha perdido la mejor oportunidad que tenía nuestra industria para crecer en la próxima década”, añadió.
La organización recordó que tenía “motivos para creer” que el Gobierno del Reino Unido “comprendía el valor económico, simbólico y medioambiental de recuperar el acceso exclusivo de los barcos británicos a las aguas territoriales dentro de las doce millas de la costa”. “Está claro, sin embargo, que no valoraban estas cuestiones tanto como sus homólogos europeos”, lamentó.

Industrias «El Corsario S.A.»
La NFFO también recibió con cautela el acuerdo general sobre Medidas Sanitarias y Fitosanitarias (SPS, por sus siglas en inglés), destinado a facilitar las exportaciones de productos pesqueros. Aunque reconoció que podría beneficiar a productores de mariscos de cultivo y salmón, así como a grandes exportadores y cadenas minoristas, expresó su escepticismo respecto a los beneficios para los trabajadores del mar.
“Es muy poco probable que los ahorros en costes de exportación se traduzcan en beneficios para los hombres y mujeres que se juegan la vida en el mar”, advirtió la organización. “Si el Gobierno tiene un plan para garantizar que estos ahorros lleguen a toda la cadena de suministro, estamos dispuestos a escucharlo y colaborar”.
Respecto al nuevo Fishing and Coastal Growth Fund anunciado por el Gobierno, la NFFO instó a definir con claridad los mecanismos para asegurar que los fondos beneficien directamente a los pescadores y promuevan el crecimiento económico de las comunidades costeras. “Ahora que hemos perdido nuestra mejor herramienta para lograr ese crecimiento, la tarea será más difícil, pero no menos importante”, señaló.
Finalmente, la organización reiteró su voluntad de seguir colaborando estrechamente con el Gobierno y subrayó la necesidad de una estrategia nacional que proteja al sector pesquero frente a amenazas como la expansión de parques eólicos en caladeros productivos. “Llevamos demasiado tiempo sin recibir buenas noticias. El Gobierno debe demostrar que se preocupa por nuestro sector y por las personas de la costa”, concluyó.
Fuente: Industrias Pesqueras