El informe final, que llegará a las manos del ministro Caputo, seguramente reavivará el impulso a la iniciativa desreguladora de Federico Sturzenegger, de abrir el transporte marítimo y fluvial de cabotaje a toda empresa, nacional o del exterior, que quiera hacerlo.
Según informó infobae está en viaje el informe que daría por terminada la poca actividad de la Marina Mercante nacional y pondría en manos de multinacionales el transporte de carga marítima y fluvial de nuestro país.
La ubicación geográfica de la Argentina «no la hace muy apetecible a navieras internacionales como la Mediterranean Shipping Company (MSC), la más grande del mundo, con sede en Suiza, o la danesa Maersk, que a pesar de todo está interesado en quedarse con el puerto de Buenos Aires«.
En caso de la apertura del mercado local, navieras como esas, o incluso menores, podrían fácilmente hacer desaparecer la bandera nacional. Los «altos costos» de nuestro país llevarían a la desaparición de los, apenas, 18 buques que todavía hoy, conforman nuestra marina mercante y que sobrevivieron al embate de los años «90.
«Un conocedor del sector enfatizó también la diferente carga tributaria sobre las empresas. Mientras, por caso, Paraguay aplica a las navieras un 10% de IVA, un 10% de Ganancias y un 10% de cargas patronales, en la Argentina las tasas son de 35, 21 y más de 50% respectivamente. Por eso, explicó, hay tantos buques paraguayos en la Hidrovía. Además, el probable y próximo cambio del impuesto a las Ganancias, bajando el umbral a partir del cual se paga el impuesto, redoblará las presiones de los sindicatos sobre navieras y petroleras para que se hagan cargo de su incidencia y no afecte los salarios de bolsillo» cuenta el portal infobae que anticipó la llegada del informe de Sturzenegger.
El informe del economista que tendrá el ministro Caputo en su escritorio hace énfasis en los, supuestos, altos salarios de tripulantes «No se trata de poca cosa. Según la información que circula, el salario promedio de un capitán de ultramar equivale actualmente a USD 10.000 mensuales promedio y el salario más bajo de los marineros a unos 4.000 dólares al mes«.
«Entre otras cosas, describe el análisis, el régimen de licencias y francos compensatorios de un marino mercante tripulante de un tanquero es de uno por cada día trabajado, lo que significa que para un buque es necesario pagar dos tripulaciones completas: una embarcada y otra de franco. Además, el salario de los marinos mercantes se actualiza mensualmente por el índice de inflación minorista (IPC) y cuando el capitán o marinero embarca recibe un 42,5% más que durante los períodos de licencia».
En el correr de la publicación, se nota la alta influencia de CAMMESA en el resultado y objetivo del estudio «El problema principal son los costos comparados y el sistema mediante el cual la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrica (CAMMESA), en definitiva subsidia una parte sustancial de los costos de los tanqueros, de empresas agrupadas mayoritariamente en la Federación de Empresas Navieras Argentinas”.
La empresa presidida por Eduardo Rodríguez Chirillo fue creada en 1992 por la ley 24065, y el decreto 1192 del 10 de julio de ese año, dispuso la creación de CAMMESA sobre la base del Despacho Nacional de Cargas.
CAMMESA es una empresa de gestión privada. El paquete accionario es propiedad de las Asociaciones que agrupan a los distintos Agentes del Mercado Mayorista Eléctrico en un 80%. El 20% restante está en poder del Estado Nacional, personificado por la Secretaría de Energía, el que asume la representación del interés general y de los consumidores atendidos por los Agentes Distribuidores.
Solo falta conocer, que hará el Ministro de Economía Luis Caputo y el Presidente Javier Milei con el informe de Federico Sturzenegger.