La Prefectura cobró a un buque surcoreano el salvataje de un tripulante y una multa por operar en Malvinas

De esta forma, no solo se establece un nuevo precedente sino que, además, el Estado Argentino recupera el dinero que el país destinó a salvaguardar la vida de un tripulante de un buque extranjero y se protege el patrimonio nacional.

El salvataje del que se diera cuenta el lunes de la semana pasada, tubo el viernes, una novedad luego de que se informara que la Argentina logró cobrar al barco de bandera surcoreana, por gastos del operativo, pero le sumó una multa por haber pescado en las Malvinas, sin autorización del Estado Argentino.

“En una difícil maniobra, en su rol de Autoridad Marítima Nacional y como responsable de la salvaguarda de la vida humana en el agua, la Prefectura Naval Argentina aeroevacuó el lunes al tripulante de un pesquero de bandera surcoreana que presentaba un cuadro de peritonitis y debía ser urgentemente trasladado a un centro de emergencia, mientras el buque navegaba fuera de la Zona Económica Exclusiva (ZEE). Hoy, en tiempo récord, y gracias a las rápidas coordinaciones del personal de la Fuerza, se logró recuperar el dinero invertido para el operativo de rescate y cobrar una multa por haber ingresado a pescar en el área de Malvinas, sin la correspondiente autorización de la República Argentina”, informó ayer a través de un comunicado la Prefectura Naval Argentina (PNA).

Desde el viernes y hasta la noche del domingo, olas de más de cinco metros y fuertes tormentas azotaron el Atlántico Sudoccidental, en la adyacencia de la plataforma continental americana, donde, en esta época del año cientos de buques pesqueros (la mayoría, chinos) se concentran en la temporada de pesca extractiva a gran escala casi al borde de la ZEE argentina, apenas más allá de lo que se conoce como “milla 201″.

Según recordaron, “el impresionante operativo de rescate había comenzado cuando el Centro Gestión de Tráfico Marítimo Comodoro Rivadavia tomó conocimiento de que un tripulante del buque pesquero SAE IN CHAMPION, que navegaba fuera de la ZEE argentina (a 261 millas náuticas de la ciudad de Puerto Madryn), presentaba fuertes dolores abdominales que podían ser compatibles con un cuadro de apendicitis”.

Según informaron fuentes de la Prefectura, la emergencia comenzó cuando el Centro Gestión de Tráfico Marítimo Comodoro Rivadavia tomó conocimiento de que un tripulante del buque pesquero surcoreano SAE In Champion, que navegaba fuera de la ZEE argentina, a unas 261 millas náuticas (438 kilómetros) de Puerto Madryn, presentaba fuertes dolores abdominales compatibles con un cuadro de apendicitis.

Las fuentes explicaron que “personal de la Prefectura especialmente entrenado para este tipo de emergencias despegó desde la Estación Aérea Comodoro Rivadavia a bordo de un helicóptero y se dirigió a la zona. Con el apoyo de un avión de la institución, el helicóptero se posicionó sobre el buque, que navegaba a 87 millas náuticas de la ciudad chubutense de Rawson, y, en una precisa maniobra, se descendió una canasta sanitaria y se izó al tripulante, mientras que en tierra se coordinaba el arribo de una ambulancia”.

Rápidamente, pudieron llegar al puerto de Rawson, y tras el aterrizaje de la aeronave, el paciente fue trasladado al hospital de Trelew para recibir atención sanitaria.

Luego de finalizadas las tareas de rescate, el personal de la Fuerza, con la orden de la ministra de Seguridad Patricia Bullrich y el Prefecto Nacional Naval, prefecto general Guillermo Giménez Pérez, trabajaron arduamente con el objetivo de recuperar para el Estado Nacional el dinero que este destinó al mencionado rescate.

Finalmente el viernes, luego de cuatro días de haberse salvado la vida, se cobró a la agencia marítima del pesquero los aranceles por la aeroevacuación y el monto correspondiente por haber cometido dos infracciones al decreto 256/10, por haber operado en las Islas Malvinas sin autorización de la Prefectura Naval Argentina, Autoridad Marítima competente en la materia.

De esta forma, no solo se establece un nuevo precedente, sino que además, el Estado Argentino recupera el dinero que el país destinó a salvaguardar la vida de un tripulante de un buque extranjero y se protege el patrimonio nacional.

El decreto 256/10 establece que todo buque o artefacto naval que se proponga transitar entre puertos ubicados en el territorio continental argentino y puertos ubicados en las ISLAS MALVINAS, GEORGIAS DEL SUR Y SANDWICH DEL SUR, o atravesar aguas jurisdiccionales argentinas en dirección a estos últimos, y/o cargar mercaderías a ser transportadas en forma directa o indirecta entre esos puertos, deberá solicitar una autorización previa expedida por la autoridad nacional competente.