El desarrollo de hidrocarburos mar adentro podría cambiar el escenario energético de la Argentina. El Estado nacional comenzó a transitar el camino exploratorio para exportar crudo y gas al mundo en mayor escala.
La Secretaría de Energía publica estimaciones de reservas en la Cuenca Norte en 31.000 millones de barriles de petróleo, lo que equivaldría a generar ingresos por 31 billones de dólares, con un barril a 100 dólares. En comparación, Vaca Muerta tiene recursos recuperables estimados en 16 mil millones de barriles de petróleo.
Los volúmenes de producción, ingresos de divisa y generación de empleo son realmente sorprendentes. Se traduciría en al menos 20.000 millones de dólares al año para el país, dependiendo del grado de desarrollo y número de descubrimientos que se hagan mar adentro. Los cálculos proyectan que solo el bloque CAN100 -ubicado a 315 kilómetros de la ciudad de Mar del Plata cuenta con un potencial productivo de 200.000 barriles de petróleo diarios, lo que actualmente tiene YPF en su totalidad.
Datos del Indec sobre salarios por actividad, evidencian que la industria energética está muy por encima, paga sueldos que van de 300 a 460 mil pesos; también en las pymes proveedoras de dicha industria pasa eso: salarios de un 60% más altos que todo el resto. Según el Instituto Argentino del Petróleo y del Gas (IAPG) aún no hay aún datos con respaldo científico respecto a la cantidad de puestos de trabajo que podría generar la industria offshore, sus estimaciones muestran que podrían generarse 20.000 nuevos empleos en el período 2023 – 2028.
Así las cosas. Mar del Plata está ante una inmejorable oportunidad y las expectativas son altas dada la proximidad con las áreas de exploración, 54 pymes proveedoras de la cadena de gas y petróleo, un puerto oceánico de ultramar, helipuerto, gran oferta hotelera y gastronómica, entre otras ventajas. Algunos dirigentes empresarios, gremiales y políticos se atreven a pronósticos grandilocuentes como. “Mar del Plata será la futura Dubái”, “La segunda Vaca Muerta” o la “Próxima Noruega”. En mi caso me conformaría que no sea la próxima Comodoro Rivadavia que cuando empezó allí el auge de la exploración petrolera en los 50, se la diagnosticó como la futura Houston y hoy vemos que lejos quedó nuestra ciudad patagónica de la texana ciudad de estados Unidos en términos de crecimiento y desarrollo.
¿Puede Mar del Plata puede ser el gran puerto hub energético?, mi opinión como técnico especializado en Administración de Puertos y Vías Navegables es que no lo está y corre serio riesgo de perder la oportunidad a manos del puerto de Quequén, tal cual lo sucedido con las cargas de granos en los años 80.
Sin embargo creo que si se aprovecha esta coyuntura energética a nivel global y el pueblo de Mar del Plata decide dar un paso al frente para abandonar la permanencia en los primeros 3 puestos del índice de desempleo en Argentina; en 10 años podría transformarse en uno de los puertos energéticos más importantes del Sur del continente, si de sus entrañas emerge un equipo de profesionales que logre desarrollar a corto y mediano plazo un programa con acciones concretas y posibles de realizar para enmendar desaciertos y deficiencias:
a) Convencer al Intendente: El jefe comunal es el principal aliado a movimientos ambientalistas que se oponen a la actividad off shore y juntos presentaron amparo ambiental ante la justicia federal en enero 2022. A partir de allí se produjeron cuatro fallos: dos de suspensión (febrero y octubre) y dos que habilitan (junio y septiembre) la mencionada exploración; hay que decir que las empresas encargadas de llevar a cabo los trabajos ya contemplan a Quequén en primer término y a Bahía Blanca después, como puertos base. Guillermo Montenegro con sus acciones no hace más que crear inseguridad jurídica, los operadores internacionales prefieren no arriesgar perdidas millonarias que deberían enfrentar si en plena actividad de exploración al propio Jefe Comunal se le ocurre presentar alguna acción judicial para que no se puedan utilizar las instalaciones del puerto local.
b) Limpiar cementerio de buques: Nadie desconoce que el puerto de Mar del Plata tiene el plantel flotante en situación de abandono más grande del país. Al menos 45 barcos, mayormente pesqueros amarran en los muelles de las 13 secciones del puerto y un ralentizado ritmo de desguace que no ayuda a despejar dudas sobre seguridad de la navegación y costos operativos.
c) Generar Espacios: Actualmente la disponibilidad de predios y galpones cercanos a muelles es escasa: tres lotes con que hay que limpiar (charra de camiones, acoplados y redes de pesca tiradas), ubicados en zona primaria aduanera. Saliendo de las instalaciones propiamente dichas, la “manzana de los circos” mediante limpieza y ordenamiento de prestadores que actualmente ocupan la mitad del predio; aparece como alternativa.
d) Capacitación del capital humano: El puerto de marplatense tiene al menos 30 años de exclusiva operatividad pesquera, hasta que en 2011 llegó la actividad de contenedores, con recaladas quincenales. Estiba, amarre, transporte de personas y manejo de componentes de la industria petrolera son inexistentes, el puerto local posee un enclave universitario a metros de sus muelles: La Universidad Tecnológica Nacional – UTN que deberá diseñar más temprano que tarde un plan de capacitación para atender servicios energéticos a trabajadores y trabajadoras e incorporar carreras de grado afines.
La dirigencia marplatense y el Gobierno Provincial, que es quien tutela el puerto de la ciudad, tendrán que trabajar intensamente porque el tiempo apremia. Hoy la exploración no puede iniciar actividades por vigencia de decisión del Juzgado Federal N°2 de Mar del Plata, a cargo de Santiago Martín, de mantener la cautelar que impide las actividades de exploración petrolera.
Paradójicamente podría jugar a favor este freno que provee la justicia, por iniciativa del propio Intendente para atender insuficiencias y fortalecer las ventajas del puerto de Mar del Plata: Puerto oceánico de ultramar (rápido acceso a profundidades naturales), bunkering (abastecimiento de combustibles), helipuerto en delegación de Prefectura Naval Argentina, infraestructura hotelera y gastronómica.
Juan Carlos Donato