Después de permanecer casi una semana anclado en Puerto Quequén debido a un conflicto judicial, el buque granelero Red Orchid ha comenzado su navegación rumbo a Perú. La embarcación, de 200 metros de eslora y bandera panameña, había estado retenida por un embargo preventivo dictado por la Justicia.
El problema se originó debido a deudas impagas en servicios de practicaje en el Puerto de Rosario y en el Río de La Plata, lo que llevó a la aplicación de medidas bajo la Ley de Navegación. Las autoridades judiciales habían impuesto un «interdicto judicial de prohibición de salida al mar», impidiendo que el Red Orchid pudiera zarpar hasta que se resolviera la deuda.
El conflicto se resolvió tras la presentación de una póliza de seguro de caución como garantía, que cubre la suma adeudada de más de 150.000 dólares. Con la garantía depositada, la Justicia autorizó el levantamiento del embargo.
El Red Orchid había liberado su lugar de amarre en el puerto para fondear en la rada exterior días antes de recibir la autorización final para zarpar. Según fuentes extraoficiales, el buque había cargado 16.000 toneladas de maíz en el Puerto Quequén con destino a Perú, y ya transportaba otras 40.000 toneladas cargadas en la terminal santafesina de Cosco, en San Lorenzo.
El embargo se produjo a raíz de un expediente civil elaborado oportunamente llamado “interdicto judicial de prohibición de salida al mar” y el navío no podía retirarse del puerto hasta que no se abonara el compromiso adquirido por los servicios prestados en otras estaciones marítimas.
Finalmente, con el conflicto legal resuelto y el embargo levantado, el Red Orchid ha retomado su viaje hacia su destino en Perú, después de haber cumplido con todos los requisitos judiciales y financieros necesarios.