En el marco de las tareas de saneamiento y recuperación de los espacios portuarios sometidos a su administración, el Consorcio de Gestión de Puerto Quequén recibió, por disposición del Ministerio de Seguridad de la Nación, la cesión sin cargo del ex buque Ribera Gallega para proceder a su desguace y disposición final.
Un problema que se repite en todas las terminales marítimas y fluviales del país, es el abandono de buques en desuso que por distintos motivos quedaron abandonados en los puertos (muchos de ellos hundidos o semihundidos), ocupando espacios de muelles imprescindibles para la operatoria portuaria.
El Presidente del Consorcio de Gestión de Puerto Quequén, Jorge Alvaro, recibió la respectiva notificación del Jefe de la Prefectura Quequén, Prefecto Principal Marcos Luffi, durante la mañana de ayer, jueves 7 de julio.
“Es una gestión muy importante para avanzar en la remoción del casco. Nos permitirá despejar la zona para proyectar el crecimiento del puerto río arriba y seguir avanzando en las acciones preparativas para la reconstrucción del Puente Ezcurra”, resaltó Alvaro.
En abril de 2021, el navío varado sobre la margen izquierda del Río Quequén, entre el sitio 6 y el ex Puente Ezcurra, había sido declarado en condición de rezago, por su estado de conservación. Un mes después, el Ente portuario solicitó la cesión sin cargo del mismo para su desguace.
El Consorcio de Gestión de Puerto Quequén deberá contratar los servicios para el desguace y la disposición final del ex buque Ribera Gallega.