El Centro de Armadores Fluviales y Marítimos del Paraguay (Cafym) manifestó su repudio contra esta decisión, en detrimento del tratado de libre navegación, y espera la intervención de las autoridades pertinentes.
En Argentina, el Ministerio de Transporte estableció que se deberá pagar 1,47 dólares por tonelada de registro neto en el peaje para el tramo norte de la Vía Navegable Troncal (VTN), más conocida como hidrovía Paraná-Paraguay.
La medida, que se oficializará a través del boletín oficial con la publicación de la resolución 625/2022, designa como empresa concesionaria a la Administración General de Puertos (AGP), desde la zona comprendida entre el kilómetro 58,4 del río Paraná, tramo exterior de acceso al Puerto de Santa Fe, hasta la altura del kilómetro 1.238 del río Paraná denominado confluencia. “El Ministerio de Transporte Argentino quiere establecer un peaje para el paso de embarcaciones a la altura de Corrientes hasta Santa Fe. Interpretamos esto como una imposición de ellos, a pesar de que sean aguas internacionales”, expresó a la 650 AM el presidente del Cafym, Esteban dos Santos.
Sobre el motivo de dicha iniciativa, el referente del sector fluvial explicó que desde el vecino país alegan que con el cobro de peaje realizarán obras, lo cual tendría que ser al revés; es decir, si fuera el caso, primero deberían hacer las obras y luego recuperar la inversión, sostuvo. Dicha situación ya no es nueva, pues no es la primera vez que los argentinos quieren cobrar al país por cruzar por dichas aguas de la hidrovía, a más de otras trabas que en muchas ocasiones intentaron imponer, como el ingreso a las embarcaciones paraguayas a verificar que los profesionales de la navegación sean aptos.
Tales mecanismos perjudican al sector fluvial, una arista más que importante para la economía del país, debido a que mueve al menos el 75% de su comercio exterior a través de las aguas, para las exportaciones e importaciones de bienes pudiendo ocasionar innumerables pérdidas, se habla de unos US$ 20 millones. Esto, sin mencionar las complicaciones que ya vienen enfrentando por la baja de los ríos, en consonancia con la situación de la sequía por el fenómeno persistente de La Niña, generando sobrecostos por no poder transportar la cantidad de mercadería que demandan las embarcaciones.
Con relación a la nueva intención de Argentina, Dos Santos explicó que existe un acuerdo de navegación firmado en el 92, en el que se establecen distintos mecanismos de colaboración para la libre navegación de los puertos. “Este tratado indica que ningún país puede imponer un arancel sin un acuerdo previo”, remarcó el titular del Cafym.
Interviene la Cancillería Paraguaya
La Cancillería Nacional tomó intervención ante la intención del gobierno argentino de cobrar un peaje en la hidrovía Paraguay-Paraná. El viceministro de Relaciones Económicas, Enrique Franco, informó que se dio instrucciones a la Embajada paraguaya en Buenos Aires para que recabe todos los datos sobre la medida anunciada en el vecino país.
“Nosotros tomamos conocimiento el viernes cuando se hizo pública la medida. Y básicamente es el cobro de un peaje entre Santa Fe y Confluencia. Entonces, efectivamente, eso puede tener un impacto en nuestras exportaciones e importaciones”, señaló el viceministro Franco en diálogo con la 1080 AM.
Explicó que inmediatamente se dio instrucción al embajador paraguayo en Buenos Aires, Julio Vera Cáceres, a fin de que recabe todas las informaciones posibles sobre la implementación de esta medida. “Hay una instancia de consulta ciudadana que menciona la norma, pero no la fecha y el plazo. Entonces, también pedimos que se averigüe. Cuándo sería la consulta, cuáles serían los términos, cómo funciona y el plazo de esa consulta”, refirió.
Refrencia en medios aregentinos
El diario Página 12 en su publicación del pasado sábado 1 de octubre. “El 91 por ciento de las barcazas que circulan por Santa Fe Norte – desde el km. 584 del río Paraná, exterior de acceso al Puerto de Santa Fe, hasta la altura del km. 1238 del río Paraná, denominado Confluencia-, vienen de Paraguay”, indicó.
Agregó que ese tramo es caudaloso, por lo que no necesita grandes obras de dragado, pero sí de balizamiento. “El río cambia permanentemente el curso y el mantenimiento consiste en señalar el camino que deben seguir los barcos. El costo de mantenimiento es de 20 millones de dólares anuales, cifra que esperan recaudar con el cobro del peaje”, señala el artículo en cuestión.
Fuente: La Nación