A través de un comunicado público, la Unión Portuaria de Chile (Comunal San Vicente-Talcahuano), uno de los principales sindicatos del país, se hizo parte del debate público en materia de seguridad acusando la falta de recursos, funcionarios y herramientas para el control efectivo de entrada y salida de drogas en los puertos de Chile, apuntando a la clase política de estar sólo haciendo shows televisivos para ganar votos, pero no tener un interés real en combatir este tema en uno de sus puntos principales.
Durante esta semana, la principal agrupación sindical que agrupa a trabajadores portuarios de Chile, la Unión Portuaria, publicó un comunicado con una serie de puntos que plantean la necesidad de invertir en medidas que permitan el control real de la circulación de drogas en los terminales marítimos nacionales y dejar de lado el show de la clase política en los medios, para así combatir de manera real estas redes criminales que afectan al pueblo chileno.
«Sabemos que las inversiones realizadas en Perú, en la última década, para controlar el ingreso de droga a las naves que se dirigen a los países de mayor consumo que están principalmente en el hemisferio norte, y que son la real meta de los productores, han ido dando resultados» comienzan diciendo en un análisis de la experiencia comparada con el país vecino.
Indican que el aumento de control en Perú han hecho que ahora los puertos chilenos sean más atractivos para los careles criminales: «Controles personalizados al ingreso a los terminales, escáner de rayos X al personal y su equipo, más el control de la carga ha dificultado la ´importación’ de droga desde nuestro vecino país y nuestros puertos se empezaron a ver como los lugares de salida de su mercancía ilícita». En este sentido, señalan que en nuestro país «La ausencia casi total de controles de ingreso, la presencia casi simbólica de escáner, la inexistencia de protocolos permanentes de control de mercancía y la escasez absurda de personal de policía marítima para el control de drogas, pues lo que hay es una pequeña dotación de la marina que se preocupa de la seguridad en toda una gobernación marítima que puede llegar a cubrir cientos de kilómetros de costa, han transformado a nuestros puertos en sitios de interés para los principales productores y distribuidores de drogas».
«Nuestro país ha sido objeto de noticias internacionales, como las 16 toneladas de cocaína que llegaron a Filadelfia, o los 1500 kg que arribaron a Marsella, provenientes de puertos de la V región, o la tonelada encontrada en Calabria provenientes de un puerto de la región del Biobío, son algunos de los ejemplos que se han visto en los últimos años, pero nada extraordinario se ha hecho por ello. Todo lo contrario, en nuestra región, la del del Biobío con 7 puertos y 3 de los mayores terminales de transferencia de contenedores del país, se le dejó sin Scanner para revisar contenedores, pues fue trasladado a San Antonio dado que ahí hace un año que el que poseían no funcionaba. Esa decisión se encontró mejor a la de adquirir otro Scanner para reemplazar al perdido, o mejor aún, dotar de un Scanner por cada puerto internacional de contenedores. Más aún, el 2017 se planteó por el gobierno de la época el que las policías pudieran ingresar a los puertos y fue transversal el rechazo a esa idea en el Parlamento, tanto del oficialismo como de la oposición (ver Portal Portuario del 4 de octubre del 2017)» indican en la misiva.
Un punto importante, es que señalan lo contraproducente que es la presencia de carabineros por la historia de conflicto, pues la policía en los puertos sólo se ha dedicado a la represión de las huelgas de los obreros, un rol de policía política y no de protección: «Por nuestra parte, la presencia policial al interior generaba una incomodidad, cosa que lo dijimos, pues fue a ella a la que se le encargó la represión a la huelga que se llevaba en los terminales marítimos y para hacer ingresar rompehuelgas a los puertos. Esa historia podría traer tensión a los trabajadores que operaban al interior de los puertos y preferimos solicitar que se le entregara más recursos y dotación a la Armada, pero ello tampoco ocurrió».
Además, en el comunicado apuntan a la clase política y todo el discurso mediático como un show para intentar conseguir votos y no un interés real en el interés de la población, pues si no ya se habría algo concreto en materia portuaria «la solución de este flagelo no es ni nunca ha sido del interés de la clase política, más allá de lograr con ello puntos más o puntos menos en la encuesta semanal o en el trabajo que la oposición de turno le hace a quien está en ese momento en el gobierno».
«Ahí la fuente de nuestra preocupación, vemos que todo es mediatización, show de tv, presencia en matinales y cifras de encuestas. Pareciera que solo utilizan las demandas, las necesidades y el dolor de la gente para sus intereses personales, y sólo se dan soluciones preocupados en lograr un objetivo electoral. No vemos que den soluciones que apunten al centro del problema. No ven que la tropa de Carabineros de Chile lleva años sobreexplotada, con deficiente formación y expuestos a abusos de sus jefaturas y actos de corrupción que les han dejado con aún menos recursos para su labor y protección, de eso nada se habla y nada se hace, quizás porque esa forma de trabajo es un flagelo al que todos los trabajadores estamos expuestos, que todos vivimos en nuestros propios trabajos y que el Estado y los partidos que lo han administrado han guardado un silencio cómplice e invisibilizando el que las fallas de los que están arriba, sean estos Ministros, Parlamentarios, Generales o Ejecutivos privados, las pagan los que están abajo, por lo que es mejor no tocar esos temas» agregan.
«Nos estamos cansando de este ruido ensordecedor y que nada aporta, estamos cansados de ser espectadores y nada más. Estamos cansados de soluciones inútiles y sin futuro y que a las verdaderas acciones que deben hacerse se les haga el quite, por poco vistosas o quizás porque que más que es preferible no pensar. Que con todo eso, se ha ido dejando atrás el dar solución a este sistema social ya obsoleto, que presenta cada vez más fallas, que genera informalidad y sectores oscuros que son caldo de cultivo para quienes quieren avanzar en la vida a través de la delincuencia que le promete ascensos rápidos a quien nace sin esperanzas. Niños y jóvenes cada vez hay más para estos comerciantes globales de la droga y todo lo que se hace no ha llegado a nada, solo a un griterío entre un bando y otro, donde lo único que buscan es la disputa de quien gobierna a quien» comentan de manera enfática.
«Este ruido deba terminar y debe dar paso a soluciones de verdad, permanentes y sostenibles, respetando a los que habitan este país y a quienes deben ejecutar su cuidado y protección, dándoles de verdad respaldo como lo que son…trabajadores del Estado y como a todos los trabajadores también se le debe dar. Alborotos y debates televisivos que buscan cazar al otro no dejan nada y solo quedan las mentes de los ciudadanos ensordecidas por horas y horas de culpas de un bando a otro. Esto debe terminar, cambiar y avanzar de verdad. Parafraseando a un famoso cantautor diríamos «Si se callase el ruido, podríamos hablar y entenderíamos que nos queda la esperanza».
Por: Alejandro Baeza – Fuente: Resumen.cl