El Sindicato de Conductores Navales de la República Argentina (SICONARA), se declaró en “estado de alerta” y denunció la asignación de dotaciones de seguridad “incompletas e inadecuadas” en buques remolcadores, areneros y lanchas, ante la “amplia interpretación” de la Resolución 285/2003 que hace la Prefectura Naval Argentina.
Anunciaron que se harán presentes en la Delegación de la Prefectura de Bahía Blanca el próximo martes 14 para rechazar la flexibilización de la norma que “pone en riesgo la vida de los tripulantes y el cuidado del ambiente, generando la injustificada pérdida de puestos de trabajo y el permanente riesgo de contaminación”, remarcaron desde el gremio.
De acuerdo a lo informado por el titular del SICONARA Mariano Vilar, “la Prefectura interpreta que puede despachar de día con patrón y jefe de máquina y de noche con un certificado con un patrón motorista”, la cual es “una persona que no tiene los capacitación necesaria para ese tipo de buques y remolcar ese tipo de pontones”.
Ante esta situación, desde el gremio pidieron que la resolución vuelva a su origen, pensada para emprendimientos familiares y cuando los buques son tripulados por sus propios dueños. “La norma era para buques paleros, embarcaciones menores en el Delta, y se flexibilizó tanto que ya tenemos buques areneros que están tirando más de 600 metros cúbicos de arena por día embarcados con patrón motorista”, sostuvieron.
De acuerdo al sindicato, la aplicación de esta regulación ya provocó el fallecimiento de un tripulante durante un remolque en la ría de Puerto Deseado y graves lesiones en otro tras la colisión de un buque arenero en el Río Paraná. Además, que se habría producido la contaminación con hidrocarburos y aceite en el Lago Argentino – Brazo Rico en abril por un buque de pasaje que operaba sin la dotación adecuada para su potencia.
El SICONARA presentó denuncias formales ante las autoridades nacionales, “alertando sobre la asignación de dotaciones que no cuentan con Jefe de Máquinas, a pesar de que la potencia de máquinas supera los límites establecidos por la mencionada Resolución, pero que sin embargo se omite su enrolamiento”.
“No podemos seguir tolerando que la falta de dotaciones adecuadas ponga en riesgo la vida del personal embarcado y contamine nuestras aguas”, afirmaron desde el gremio y concluyeron que “es necesario que las autoridades competentes actúen con responsabilidad y urgencia para garantizar una navegación segura y la preservación del ambiente».