La Aduana clausuró la Terminal 4 ante demoras y sobrecostos que afectan a importadores y exportadores. Qué sucede con las cargas sensibles y qué impacto tiene en el comercio exterior.
El Puerto de Buenos Aires atraviesa un momento de tensión luego de que la Dirección General de Aduanas decidiera clausurar de forma temporal la Terminal 4. La medida responde a reiterados incumplimientos de la empresa concesionaria, sumados a demoras injustificadas y costos fuera de presupuesto que complican a importadores, exportadores y despachantes de aduana.
Asi se hizo conocer a traves de un comunicado del Centro de Despachantes de Aduana a sus asociados: «Les informamos a los socios de la Institución que la Subdirección General de Operaciones Aduaneras Metropolitanas de la Dirección General de Aduanas (DGA) tomó la decisión de cerrar la Terminal 4 a partir de las 20 hs del día de la fecha porque «han evidenciado demoras injustificadas por parte de la permisionaria por acciones imputables exclusivamente a ella, que generan extra-costos o costos fuera de presupuesto a los importadores/ exportadores / despachantes, etc«.
En tanto que el comunicado oficial de la DGA manifiesta «Me dirijo a Uds. de informarles que como consecuencia de reiterados incumplimientos respecto del acta de compromiso suscripta el día 5 de junio de 2025 con los representantes de la Terminales Portuarias de la Aduana de Buenos Aires; se procederá al cierre de la TERMINAL PORTUARIA 4 S.A., toda vez que, entre otros motivos, se han evidenciado demoras injustificadas por parte de la permisionaria por acciones imputables exclusivamente a ella, que generan extra-costos o costos fuera de presupuesto a los importadores/ exportadores / despachantes, etc«
Aunque aún no hay una fecha clara para la reapertura completa, la decisión busca poner freno a las irregularidades que, según las autoridades, atentaban contra la eficiencia y la transparencia del principal puerto del país.
Excepciones para evitar perjuicios en cargas sensibles
Para mitigar el impacto de esta suspensión, se establecieron excepciones en la operación. Por ejemplo, se permite la carga de exportación de un buque con arribo previsto para el 26 de junio, siempre que la mercadería respete el horario de corte del 25 de junio a las 18:00.
También continúan las operaciones relacionadas con productos perecederos, medicamentos, explosivos y mercadería refrigerada, además de la entrega de cargas importadas con turnos asignados previamente para el día del cierre. Estas medidas buscan preservar las cadenas logísticas que no admiten demoras sin pérdidas económicas significativas.
Un puerto con problemas estructurales desde hace años
El Puerto de Buenos Aires, el más importante del país, enfrenta dificultades que no son nuevas. Desde al menos 2012, diferentes sectores alertan sobre la pérdida de eficiencia y la necesidad de modernizar su gestión. Hoy, apenas dos multinacionales operan el 62% de la carga contenerizada del país, con una capacidad total de 1,5 millones de TEUs anuales.
En los últimos meses, se aprobó el decreto 299/23 que extendió por tres años las concesiones a las empresas Terminales Río de la Plata (DP World) y Terminal 4 (APM Terminals, Grupo Maersk), mientras se prepara un nuevo esquema con dos terminales para la próxima licitación, en un contexto de presión por simplificar trámites y reducir la burocracia portuaria.