En 2023, China a aceleró el paso y, tras ratificar el memorándum de entendimiento firmado con la gobernación de Tierra del Fuego, se prepara para lanzar el desarrollo de un puerto multipropósito, una central eléctrica y una planta industrial para el desarrollo de fertilizantes y otros insumos químicos que demanda el agro de ese país.
Al acuerdo con la gobernación fueguina sólo le falta un aval de la legislatura provincial para regir por completo. China asegura que invertirá al menos 1.250 millones de dólares para llevar a cabo todo el emprendimiento.
En concreto, el proyecto propone «la construcción de un proyecto con una capacidad anual de 600.000 toneladas de amoníaco sintético y 900.000 toneladas de urea, más la construcción de una terminal portuaria multipropósito con recinto interno (que permita el amarre de embarcaciones de 20.000 toneladas) y una central eléctrica de 100 MW«.
«El puerto y la central eléctrica servirán para cubrir las necesidades locales además de abastecer al propio proyecto«, se informó de forma oficial en Tierra del Fuego.
El avance de este emprendimiento encendió las alarmas a principios de este mes tras las versiones de que China aprovecharía esta inversión para montar una base naval en la provincia fueguina. Dada esta presunción, el gobernador local Gustavo Melella salió a negar esa posibilidad y también las observaciones respecto de un potencial interés chino por hacer pie en la Antártida argentina.
El memorándum definido para Tierra del Fuego resultó firmado por la Gobernación y la firma Shaanxi Chemical Industry Group. En el texto acordado, la empresa asiática se compromete a «impulsar activamente a las empresas chinas a invertir en Tierra del Fuego, sumar a la fortaleza en materia científica y tecnológica, esforzase por aumentar el valor agregado a los recursos energéticos locales, contribuyente al desarrollo económico de Tierra del Fuego».
El acuerdo establecido es por tres años con renovación automática por un período similar salvo una de las partes comunique la decisión de no seguir con el acuerdo.
Por otro lado, los bancos chinos que financian la construcción de las centrales hidroeléctricas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic, sobre el río Santa Cruz, transfirieron al Banco Central 212 millones de dólares para retomar el flujo de fondos para la obra, y se suman al desembolso de 287 millones de los últimos días de 2022.
Con el envío de estos millones, se pusieron operativos nuevamente los desembolsos para continuar las represas que lleva adelante la empresa estatal Energía Argentina (ENARSA).
En la última semana de 2022 se había recibido otro desembolso de 287 millones de dólares, pero en ese caso estaban destinadas a reembolsar los adelantos que había realizado el Tesoro Nacional para cubrir la demora en el financiamiento chino, de manera de darle continuidad a la obra.
A comienzos de diciembre llegó al país, provenientes de China, la primera de las tres turbinas tipo Kaplan que potenciarán la Central Hidroeléctrica Cepernic, y que se estima podrá estar en funcionamiento entre fines de 2024 y comienzos de 2025, en tanto que la totalidad de la obra estaría operativa hacia 2028.
El acuerdo con China se remonta a 2013 pero fue frenado a partir del Gobierno de Mauricio Macri, en 2019, quien pidió un «rediseño de ingeniería» y obligó a una renegociación del financiamiento y una adenda de contratos.
Con los desembolsos recientes, el financiamiento hasta hoy alcanza aproximadamente los 1.900 millones de dólares.
¿Se entiende por que EE.UU no quiere que Argentina avance en sus convenios con China?