El río Paraná creció en su altura en varios puertos de las provincias de Santa Fe y de Entre Ríos durante los últimos días, se mantiene por encima de los niveles registrados en 2020 y 2021 y se espera que siga con esta tendencia para los primeros días de marzo, pero aún por debajo de sus niveles normales y de aguas bajas, informó ayer el Instituto Nacional del Agua (INA).
Se trata de una “mejoría en la perspectiva meteorológica y los caudales previstos desde la cuenca alta” que provocó un crecimiento de la altura del río, aunque siempre “dentro del rango de aguas bajas”, señaló el organismo.
La Central Hidroeléctrica Itaipú abrió en simultáneo dos de las tres canaletas de su vertedero, el pasado domingo, algo que no ocurría desde marzo de 2016, y se prevé que continúe vertiendo agua los próximos días.
La entidad binacional argumentó esta decisión en las intensas precipitaciones registradas aguas arriba en el Paraná y ante la crecida del río, por lo que ambas canaletas vertieron 12 millones de litros de agua por segundo, ocho veces el caudal promedio de las cataratas del Iguazú.
La bajante es “la más larga de la historia” (desde 1884) y de características extraordinarias por su “magnitud y persistencia”, advirtió el INA, y no tiene un final ni retorno definitivo a la normalidad debido a las condiciones climáticas para los próximos meses.
A ello se le suma una sequía calificada como “histórica” y “la peor de los últimos 60 años según los registros provinciales”, con efectos “devastadores”; y pocas o nulas lluvias en todo el territorio entrerriano desde 2021.
El río Paraná crecía ayer en los puertos de las ciudades de Santa Fe (2,30 metros), San Lorenzo (1,85 metro) y Villa Constitución (1,73 metro), a diferencia del puerto de Rosario, donde estaba en baja, con una altura de 1,70 metro, según los datos publicados por la Prefectura Naval Argentina en su página web.
En Paraná, el río se mantenía ayer en 2,15 metros, más cerca del nivel de aguas bajas (2,30) pero aún menor a su altura promedio en febrero (3,74 metros).
En el noroeste entrerriano, en La Paz, el río Paraná llegó ayer a 3,50 metros de altura, superó su límite de aguas bajas (3,20 metros) aunque se mantiene por debajo de los 4,59 que la Prefectura Naval Argentina (PNA) registró como promedio este mes entre 1996 y 2021.
Donde también se registró una crecida fue en el puerto de Diamante, más al sur de la costa entrerriana, con un nivel de 2,30 centímetros, por debajo de los 2,40 metros del límite de aguas bajas y del promedio histórico de 3,96 de los últimos 25 meses de febrero.
Por otro lado, en Victoria, el río Paraná se encuentra con 2,68 metros, y al igual que el resto de la costa, se mantiene cerca de sus medidas que alertan las aguas bajas (2,60), y detrás de lo registrado como promedio para este mes (4 metros).
La bajante histórica tuvo su inicio en marzo de 2020, un año más tarde tuvo una tendencia alcista sin alcanzar su normalidad, pero volvió a caer a fines del 2021
Además, el INA prevé una mejora para las próximas semanas, llegando a 2,58 metros en Paraná a principios de marzo; 3,72 en La Paz; 3,04 metros en el puerto de Diamante; y 3,69 metros en Victoria, unos 80 kilómetros más al sur, frente a Rosario.
Fuente: La Capital -Santa Fe