El Gobierno analiza profundizar el dragado para compensar el aumento del peaje

El gobierno nacional analiza aumentar en dos pies la profundidad del dragado de la hidrovía llevándolo a 36 desde Puerto General San Martín hasta el río De la Plata.

Así se lo dejaron trascender desde la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables de la Nación a representantes de los usuarios de la vía navegable, como agroexportadores y navieras. 

La mayor profundidad del dragado, que hoy está asegurado en 34 pies, es junto con otras obras menores en estudio que mejorarán la navegación, parte de los alicientes que el gobierno quiere poner sobre la mesa en la misma audiencia pública que realizará el mes que viene para presentar una suba de tarifas con la que busca reducir el rojo de la Administración General de Puertos (AGP) que oscila los 94 millones de dólares 80 de los cuales lo forma una deuda con la dragadora belga Jan de Nul.

Esta posición se dá mientras se avanza con la preparación del llamado a licitación en busca de un nuevo operador privado.

El gobierno propone aumentar el peaje de la Hidrovía en 0,48 dólar por tonelada de registro neto para “aplicar al monto estimado de deudas y previsiones pendientes de pago” con Jan de Nul. Y también quiere sumar otros 0,76 u$s por tonelada “para equilibrar la ecuación económica financiera en función del cuadro de resultado proyectado en el marco de la planificación de los trabajos”.

Por otro lado se prevé un adicional de 0,68 u$s por tonelada para solventar “trabajos de mejoras propuesto«, ítem en el que entra las mejoras en profundización, y por el que piensan recolectar u$s 47 millones por año.

Según se dispuso, la suba final, que sería de 1,92 u$s por tonelada, dejaría al peaje en de 4,98 u$s por tonelada y sería por tres años, aunque podría reducirse, anticipa el gobierno, a 1,42 u$s por tonelada “si se lograra resolver el problema tributario que impacta negativamente en los costos«,  en referencia al costo extra en IVA que debe afrontar por desprolijidades administrativas del gobierno anterior al traspasar de la hidrovía a la AGP.

Los usuarios rechazan la suba del peaje porque, a diferencia de lo que ocurre con el resto de las tarifas de servicios públicos, no tiene subsidio y el aumento es para reducir el rojo del organismo estatal que administra la hidrovía, y proponen que, como pasó con las energéticas, el Estado pague a sus proveedores privados con un bono.

El camino normativo para el aumento del dragado a 36 pies está allanado desde la extensión de contrato firmada durante el gobierno de Cristina Fernández, ya que en esa oportunidad se dispuso la posibilidad de llegar a los 36 pies. 

El gobierno estima que la mayor profundidad permitirá que los barcos salgan más cargados y así el flete se reduzca por lo que el impacto de la suba de tarifas sería menor, dándole un equilibrio entre aumento de peaje y mayor productividad.

De cualquier forma, los usuarios de la Vía Navegable Troncal, ya le anticiparon al gobierno que la medida podría no tener ese efecto al chocar con una normativa de Prefectura, que establece que ante un dragado de 36 pies se deben mantener, para seguridad, una profundidad extra de 2 pies, debajo de la quilla de la embarcación, reduciendo la carga extra que que se le generaría al barco.

En ese marco, la AGP busca llegar a la audiencia pública con una clara reducción del rojo generado por la mala administración de los recursos, en especial reduciendo la deuda de 80 millones de dólares que según dice, se mantiene con la dragadora Jan de Nul.

Si bien en la AGP se esfuerzan en hacer resaltar como una deuda que fue «heredada de la gestión anterior» no es menos cierto que los funcionarios son los mismo que actualmente se encuentra administrando la Vía Troncal, a excepción del actual interventor Gastón Benvenuto.

En los usuarios privados, la suba de tarifas del peaje de la hidrovía que impulsa el gobierno cayó muy mal, sobre todo porque se trata de una forma de compensar el rojo de las cuentas de AGP. Es más, el mal humor crece cuando les dicen que otra de las razones de la suba es que la tarifa en dólares  (u$s 3.06 la tonelada de registro neto) quedó retrasada por la inflación acumulada en dólares.

Ocurre que las propuestas que recibió el gobierno por parte de la dragadora Deme Dredging de realizar el dragado con una rebaja del 30% contrastan con la posición de la AGP.