Uno de los grandes dilemas que suelen enfrentar quienes deben tener opiniones es repetir un relato o ser políticamente incorrectos.
A veces nos queda la duda si repiten por no saber, por no ir correctamente al lugar desde dónde surgen las cifras o simplemente son funcionales.
Lo que de ninguna manera, el movimiento obrero puede darse el lujo, es de dejar «que le cuenten» un relato, cuando nosotros mismos somos «artífices de nuestro destino…»
No dejemos que nos armen un relato basado en cifras erróneas o que nos mientan diciendo que determinados hechos que vemos a diario y que ocurren en nuestro litoral y con nuestros recursos, no ocurren.
Las distintas secretarias de pesca de los países de la OTAN, dan cifras de capturas; el gobierno de ocupación en Malvinas da cifras; la industria naval europea y sus pymes dan cifras; los distintos países que operan en nuestro territorio dan los boletines económicos (BOE).
Los registros de buques a escala global también dan cifras y en tan solo estas dos fotos, vemos una realidad brutal. Los dos buques que descargan sus capturas en Vigo pertenecen a empresas que operan con cuotas de pesca (CITC) otorgadas por nuestro país y a la vez operan en Malvinas con pabellón de la unión Jack en Joint Venture con Inglaterra.
En la otra foto se verá también que un puñado minúsculo de buques, en poco más de una semana, lleva capturadas más de 17.000 toneladas que deben sumarse a las más de 55.000 toneladas que ya transbordaron en la primera etapa (récord).
La otra gran disyuntiva podría ser: 1) Callarnos estas cosas o acompañar relatos «equivocados» y quizás, solo quizás llegar a ser un «Sindicato grande» o 2) Señalarlas, exponerlas, denunciarlas, generar nuestra propia información, bancarla con el lomo y ser «Un gran sindicato».
Indudablemente y, aún sabiendo el resultado, seguimos optando por la segunda opción.
Por: Walter Castro – Secretario General de SANAM