La reciente salida de Sergio Sasia de la CATT y la exclusión de la UTA marcan un momento de tensión en el sector. La postura del moyanismo, respaldada por otros referentes sindicales, busca confrontar las políticas del gobierno de Javier Milei en un contexto de agitación política y sindical.
El próximo martes 12, en medio de un clima de creciente tensión sindical, se reunirá la Mesa Nacional del Transporte para evaluar posibles medidas de fuerza. “Lo más seguro es que se acuerde ir a un nuevo paro. La cosa, lejos de aflojar, se va a tensar más”, señalaron fuentes cercanas a Pablo Moyano, líder de Camioneros, a NA.
La Mesa Nacional del Transporte cuenta con el respaldo de figuras sindicales de peso como Omar Maturano, secretario general de La Fraternidad, y Juan Carlos Schmid, líder de los trabajadores de Dragado y exsecretario general de la CGT. También participan Pablo Biró, de la Asociación de Pilotos Aéreos, y Juan Pablo Brey, de la Asociación de Aeronavegantes, junto con Omar Durdos del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU).
La ausencia notable es la de la Unión Tranviarios Automotor (UTA). Roberto Fernández, líder de los colectiveros, quedó fuera de la mesa tras tensiones surgidas por negociaciones independientes con el gobierno. “Fernández no va a estar el próximo martes, se cortó solo”, coincidieron fuentes sindicales, señalando la fractura con sus pares del sector.
Además, indicaron que la reunión podría realizarse en la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT), «ahora que logramos allanar el camino”, en relación a la reciente salida de la conducción del ferroviario Sergio Sasia, quien renunció acorralado por la postura dura de Pablo Moyano, que lo acusó de “pasarse del otro lado del mostrador”.
El trasfondo político y la mirada al PJ
La disputa interna del sindicalismo se enmarca en un contexto político complejo. La reciente definición de la conducción del Partido Justicialista (PJ), que quedó en manos de Cristina Fernández de Kirchner sin elecciones gracias a un fallo judicial, también es observada con atención. La estrategia de Moyano busca presionar y marcar su posición frente a un peronismo que se muestra dividido y en constante reacomodamiento.
Según NA, quienes conocen al líder sindical afirman que “está re caliente con lo que la dirigencia política del peronismo está haciendo en este momento de angustia social” y que “la gente no quiere saber nada con ver cómo se pelean por los cargos”. Incluso, alguien que lo frecuenta no descarta que el camionero tome la decisión de alejarse del partido.
Fuente: Grupo Provincia