Patrones y oficiales paralizan los buques en los puertos de San Lorenzo y se hallan en estado de alerta y movilización por la media sanción a la ley ómnibus.
Los trabajadores nucleados en el Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y Cabotaje Marítimo, que lidera Mariano Moreno, cumplen hoy una huelga que paraliza e inmoviliza a los buques arribados a los puertos de la ciudad de San Lorenzo, y ratificaron el estado de alerta y movilización ante el análisis de la reforma laboral y el Impuesto a las Ganancias por parte de la Cámara de Diputados, informó la organización sindical.
El gremio se sumó de esa forma a las entidades sindicales que ya declararon el alerta a partir del segundo tratamiento por parte de los diputados nacionales del proyecto de reforma laboral y de Ganancias, que el Gobierno pretende aplicar nuevamente y que incorporaría a más de 800 mil trabajadores a abonar el tributo sobre sus salarios.
El sindicato convocó a los legisladores a rechazar la aprobación de ese impuesto al trabajo, en tanto Moreno expresó en un documento que “la fuente laboral está en riesgo de extinción desde que asumió Javier Milei y, ahora, los salarios”, a la vez que fustigó los últimos hechos ocurridos “en contra de la bandera nacional y la marina mercante”.
“El momento es ahora”, sostuvo el dirigente, quien lanzó hoy una medida de fuerza que afecta el amarre, practicaje, provisiones y servicios a buques que llegan al cluster de puertos entre San Lorenzo y la localidad de Timbúes, y adhirió a la convocatoria de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) de realización desde el próximo lunes de asambleas de tres horas en todas las modalidades, expresó Moreno.
Esas asambleas de tres horas en todos los modos de transporte, lanzada por la CATT que lidera el ferroviario Sergio Sasia, interrumpirán los servicios para rechazar Ganancias.
Los argumentos
Para Moreno, la primera versión de la Ley Bases expuso las intenciones del Gobierno de abrir la Zona Económica Exclusiva (ZEE) de la pesca, pero no avanzó y, en marzo último, el gremio denunció el incumplimiento de la Ley de Cabotaje con “un permiso de exención (waiver) para un remolcador holandés, que reemplazó el trabajo de una grúa argentina”.
Además, en el conflicto paritario con la Cámara de Arena y Piedra de la actividad fue dictada la segunda conciliación obligatoria y, ahora, el gremio denunció la existencia de un borrador para abrir el cabotaje a banderas con tripulaciones extranjeras “más baratas”.
“Existen vastos argumentos para dudar respecto de las intenciones de la mal llamada libertad del Gobierno. Los diputados están analizando una reforma laboral y la nueva aplicación del impuesto al trabajo, pero también votarán la exención de tributos al blanqueo de dinero que fugaron empresarios y que el presidente aplaude e incentiva. Probablemente aprueben un impuesto para el que labura y lo sacarán para quienes fugan y recaudan a través de la especulación financiera”, puntualizó el dirigente sindical.
Moreno llamó a los diputados nacionales a asumir “su responsabilidad” y a decidir “si están dispuestos a ir en contra de los trabajadores o si cumplen su compromiso social y defienden la dignidad del empleo”, y enfatizó que “el Ejecutivo, los gobernadores y los legisladores timbean los derechos laborales, los salarios y las fuentes de trabajo”.