Grupos de expedición y rescate recorren el Atlántico Norte en busca de un pequeño sumergible desaparecido que tenía por objetivo recorrer el área donde yacen los restos del transatlántico británico Titanic.

Crecen los temores por las cinco personas que viajaban a bordo, ya que la nave tiene autonomía de oxígeno por hasta 96 horas.
La nave de 6,5 metros de largo comenzó su inmersión el domingo pero perdió contacto con la superficie menos de dos horas después, según las autoridades.
“Desde hace cierto tiempo no hemos podido establecer comunicación con uno de nuestros vehículos de exploración sumergibles que actualmente visita el lugar del naufragio del Titanic”, dijo la noche del lunes a la AFP la empresa que opera la nave, OceanGate Expeditions, en un comunicado.
La compañía emplea un sumergible llamado “Titán” para sus inmersiones hasta la zona del histórico naufragio, con asientos a un precio de 250.000 dólares cada uno, según su sitio web.
Uno de los pasajeros fue identificado como el empresario británico Hamish Harding, cuya empresa de aviación había publicado en redes sociales sobre su expedición al área.
Harding, aviador de 58 años, turista espacial y presidente de la asociación Action Aviation, publicó el domingo en su Instagram que estaba orgulloso de unirse a la misión Titanic de OceanGate.
El empresario paquistaní Shahzada Dawood y su hijo Suleman Dawood también están en la embarcación.
“Por ahora, se ha perdido el contacto con el sumergible y la información disponible es limitada”, señaló su familia en un comunicado.

Shahzada Dawood es vicepresidente del conglomerado Engro, con sede en Karachi, que tiene inversiones en energía, agricultura, petroquímica y telecomunicaciones.
Los rescatistas han estado buscando en un área remota del Atlántico Norte donde yacen los restos del Titanic -hundido en 1912- a 650 kilómetros de la costa de Terranova, Canadá, y unos 4.000 metros de profundidad en el océano.
La Guardia Costera de Estados Unidos informó que destinó dos aviones a las tareas y las autoridades canadienses enviaron un avión y un barco para la exploración.
El tiempo es un factor crítico, ya que el barco tiene un máximo de 96 horas de oxígeno de autonomía para la respiración de cinco personas.
El contraalmirante de la Guardia Costera estadounidense, John Mauger, dijo el lunes a periodistas en Boston que creía que todavía quedaban 70 horas o más disponibles.
Pero, sin recabar reportes de avistamientos del sumergible o señales de comunicación de los exploradores, su equipo de rescate suspendió los vuelos de búsqueda por la noche.
Fuente: Información publicada por www.lapatilla.com