El plan «0 emisiones» de Oceana no contempla el arrastre

Antes de que la Comisión Europea revele cuál es su estrategia para que la flota pesquera europea afronte la transición energética y reduzca su dependencia de los combustibles fósiles, a finales de este mismo mes, la ONG Oceana ha dado a conocer cuáles son sus propuestas. 

Presentación del informe El camino para descarbonizar el sector pesquero de la UE para 2050, de Oceana.

La organización, que ha presentado en Bruselas el informe “El camino para descarbonizar el sector pesquero de la UE para 2050”, incide en la idea de que si la flota quiere cumplir con el objetivo de reducir un 30% las emisiones de CO2 en el horizonte 2030 y alcanzar la neutralidad climática en 2050, los dos pilares del Pacto Verde de la CE, debe afrontar su particular transición en lo referido cómo, dónde y con qué buques pesca. El futuro a largo plazo depende de ello, subraya la ONG, tanto por el interés del sector pesquero en poder pescar recursos en abundancia en ecosistemas sanos, como desde el punto de vista de la rentabilidad económica de su actividad. Una rentabilidad que el incremento de precios experimentado en el último año ha puesto en entredicho.

“La pesca depende totalmente de los combustibles fósiles. Es uno de los principales gastos en los que incurre el sector pesquero, lo que tiene un impacto en la rentabilidad y la viabilidad del negocio”

“La pesca depende totalmente de los combustibles fósiles. Es uno de los principales gastos en los que incurre el sector pesquero, lo que tiene un impacto en la rentabilidad y la viabilidad del negocio”, indicó en la presentación Vera Coelho, directora de políticas y comunicación de Oceana en Europa. Coelho recordó que la sostenibilidad de la flota, tanto desde el punto de vista de la disponibilidad de los recursos como desde la perspectiva de la rentabilidad, pasa por reducir el consumo de combustible. “Y si el objetivo es reducir combustible, deberemos empezar por las flotas más intensivas en consumos”, dijo con relación al arrastre. Al mismo tiempo, la ONG urge la “prohibición total de las pesquerías destructivas” en las zonas donde se sabe que existen hábitats de carbono azul –carbono secuestrado en el lecho marino– que se libera tras el paso de la red y sobre lo que es necesario contar con mayores conocimientos científicos, reconoce el informe.

La reconocida ONG apunta, una vez más, a la flota arrastrera porque “las artes de pesca activas que entran en contacto con el fondo, como el arrastre de fondo, son las que más combustible consumen por kilo de pescado desembarcado”.

“Hemos identificado que los pescadores son conscientes de la importancia de la descarbonización. Dependen de los combustibles externos y el incremento de los precios está poniendo contra las cuerdas al sector”, indicó por su parte François Bastardie, de Alma Maris Consulting, y responsable de informe. “Debemos identificar soluciones win-win para el sector y buscar alternativas a las modalidades más dañinas, que son las menos eficientes y rentables”, apuntó el autor del estudio.Arrastrero en Celeiro. Foto: Max

CUATRO LÍNEAS DE ACCIÓN Y CAMBIOS EN LA POLÍTICA COMUNITARIA

El informe impulsado por la ONG plantea medidas distribuidas en cuatro ejes de actuación. Así, en primer lugar propone aprovechar y mejorar soluciones existentes en el mercado dirigidas a lograr aparejos de pesca reduzcan el consumo de energía. “El arrastre de fondo es la técnica menos eficiente a día de hoy: son necesarios 11 litros de combustible para producir un kilo de gambas del Mediterráneo”, indicó el autor del informe. En este sentido, se plantea transicionar de artes móviles a soluciones de pesca pasiva, lo que lograría ahorros de combustible del 34 %, indicó. Apostar por mejoras en la hidrodinámica de buques, o la optimización de las rutas y velocidad de navegación, son otras de las propuestas del informe.

La segunda línea de acción, pensando en el largo plazo, pasa por readaptar buques y “cambiar técnicas de pesca”. En tercer lugar, el documento señala la necesidad de avanzar en la utilización de nuevas fuentes de propulsión alternativas, como la eléctrica en el caso de la flota de pequeña escala, o combustibles ecológicos, como gas LNG o hidrógeno verde. En cuarto lugar, y clave en la estrategia planteada por Oceana, el informe reclama “acción política” para impulsar la transición.

“Mientras la pesca sea rentable, no habrá incentivos”, indicó Vera Coelho, al tiempo que recordó que las exenciones fiscales a los combustibles vigentes en la UE están distorsionando la realidad económica del sector y “desalientan” el cambio.

“Mientras la pesca sea rentable, no habrá incentivos”, indicó Vera Coelho, al tiempo que recordó que las exenciones fiscales a los combustibles vigentes en la UE están distorsionando la realidad económica del sector y “desalientan” el cambio. Para ello, Oceana plantea gravar los combustibles  fósiles – una medida diseñada también pensada en el arrastre, pues “es la flota que necesita más dinero de los contribuyentes para seguir operando”– y utilizar lo recaudado para “ayudar a derribar barreras en el desarrollo” de estas alternativas”.

Al mismo tiempo, los armadores que apuesten por soluciones que ahonden en la reducción de emisiones se deberían beneficiar de medidas fiscales específicas, de más posibilidades de pesca o de un mejor posicionamiento en el mercado a través de una ecoetiqueta que certifique su compromiso ambiental, sugiere la ONG, en cuyo informe apela también a la responsabilidad de Bruselas y su legislación actual “que impide al sector adoptar algunas de estas medidas” ante la limitación de capacidad que impone la PPC.

Fuente: Industrias Pesqueras Foto: Mauricio Altamirano – OCEANA