No fue sino hasta que estalló el conflicto entre Rusia y Ucrania que el mundo se enteró de la importancia de esos mercados en la exportación de dos granos de consumo vital para el ser humano: trigo y maíz.
Sí, las lejanas latitudes de Europa del Este son grandes exportadores de la materia prima para la producción de aceites, harinas y otros alimentos básicos, y ante el estancamiento de sus envíos, el reemplazo de los volúmenes queda sujeto a otros mercados en el mundo. Sin embargo, la reconfiguración de las exportaciones de granos en el mundo tiene impactos de corto y largo plazo, considerando las consecuencias inmediatas y proyectadas.
Trigo y el corto plazo
Según datos publicados por BRS Bulk, en el corto plazo, los mercados de Estados Unidos, Australia, Argentina e India estarían en condiciones de suplir los volúmenes que tradicionalmente provienen de puertos como Odesa, Mariúpol y otros que transitan por el Mar Negro con la preciada carga de trigo y maíz.
Los envíos desde Rusia están afectados por sanciones económicas y comerciales del mundo entero a las cargas rusas, y las transacciones en rublos están condenadas en todo el planeta. Por su parte, las cargas ucranianas son bienvenidas en los mercados internacionales, pero están atrapadas en puertos afectados por ataques propios del conflicto. Lo cierto es que, combinados, trigo y maíz del Mar Negro representan el 80% de las exportaciones de granos de la zona y son el 40% del volumen global de estos cereales: en la temporada 2020-21 Rusia-Ucrania exportaron en conjunto 55,9 millones de toneladas métricas de trigo, 39,1 mln mt provenientes de Rusia y 16,8 mln mt de Ucrania. Las estimaciones preliminares para 2022 de la USDA (Departamento de Agricultura de Estados Unidos), es que ambos países alcancen un 77% de su meta de exportación.
Los principales importadores de los granos ruso-ucranianos son Egipto, Turquía, Irán e Indonesia, donde el mercado egipcio es el cliente que más depende de ellos, siendo el más grande consumidor mundial de trigo, y obteniendo más de 70% de Rusia-Ucrania. Turquía importa un volumen menor que Egipto, pero depende 90% en los envíos de los países actualmente en conflicto.
La producción de trigo argentino subió un 16%, con lo que las proyecciones de exportaciones suben a un récord de 14,5 mln mt para el periodo 2021-22, con Chile, Brasil e Indonesia como los principales clientes, mientras que embarques de menor volumen cruzan el Atlántico hacia África. A pesar de la aparente buena noticia que una mayor demanda significaría para Argentina, ese país cuenta con políticas que restringen la exportación, y que podrían entrar en vigor de implementarse impuestos sobre las exportaciones.
Maíz y el largo plazo
El 16% del maíz mundial sale de la región del Mar Negro y el 93% proviene de Ucrania. La temporada alta de exportación de maíz dura hasta mayo, y las nuevas plantaciones deben realizarse en abril… pero con el conflicto definiendo su desenlace, aún no se sabe si es que se podrá concretar la siembra y la consecuente proyección de producción para el año siguiente.
ECSA es una de las más grandes esperanzas para reemplazar la producción ucraniana, al ser la segunda región exportadora de maíz en el mundo, y donde Argentina y Brasil suman el 40% del volumen global.
España y Holanda son los principales consumidores de maíz ucraniano y brasilero. Actualmente, Argentina tiene un 4% de déficit interanual, mientras que Brasil pasa por una buena racha, con un excedente de 105% y potenciales nuevos mercados en el norte de África. Sin embargo, aún faltan meses para la cosecha de maíz en Sudamérica, lo cual la deja susceptible a efectos climáticos que pudieran afectar la producción.
¿Podrán Argentina y Brasil soportar el aumento de demanda? ¿Cómo se comportarán los precios? ¿Se reanudará el suministro desde el Mar Negro? Son todas preguntas que solo el tiempo responderá.
Entre 200 y 300 barcos graneleros bloqueados por Rusia
Las exportaciones de trigo de Ucrania y Rusia, que constituyen una parte vital del suministro mundial de alimentos, siguen siendo bloqueadas por Rusia para que no salgan del Mar Negro, dijo esta semana el mayor comerciante agrícola de Alemania, BayWa.
«Todos los puertos ucranianos se encuentran bloqueados: del país no está saliendo nada», declaró a la agencia de noticias dpa Jörg-Simon Immerz, responsable de la comercialización de cereales en BayWa, quien añadió que la actividad exportadora de la parte rusa es «muy limitada».
La consideración de Immerz fue respaldada por la Autoridad Marítima de Panamá, que dijo, este 17 de marzo, que la Armada rusa estaba impidiendo la salida de entre 200 y 300 barcos del Mar Negro, la mayoría de los cuales transportan grano.
Fuente: MundoMarino/DW-Made For Minds