El río Paraná sigue creciendo en Santa Fe, quedó a 9 cm del nivel de alerta

El río Paraná sigue creciendo en la ciudad de Santa Fe. Este martes 5 de diciembre Prefectura Naval Argentina reveló que el agua llegó a 5,21 m, ubicándose a solo 9 centímetros del nivel de alerta. A su vez, el Servicio Meteorológico Nacional mantiene vigente una alerta amarilla por tormentas para la tarde.

Prefectura Naval Argentina midió este martes a las 12; 5,21 m en el Puerto de Santa Fe. El río Paraná creció 3 centímetros en 12 horas y quedó a 9 centímetros del nivel de alerta, que en la ciudad de Santa Fe es de 5,30 metros; mientras que el nivel de evacuación es de 5,70 metros.

Además, cabe destacar que el Servicio Meteorológico Nacional mantiene vigente un alerta amarilla por tormenta para la tarde de este martes que abarca a los departamento La Capital, San Jerónimo y Garay de la provincia de Santa Fe. Según el organismo «el área será afectada por tormentas, algunas localmente fuertes. Las mismas estarán acompañadas por ráfagas, actividad eléctrica frecuente, ocasional caída de granizo, y principalmente abundante caída de agua en cortos períodos. Se estiman valores de precipitación acumulada entre 30 y 50 mm, pudiendo ser superados de forma puntual. Se espera que la precipitación acumulada en la provincia de Entre Ríos se encuentre entre 40 y 80 mm, pudiendo ser superados de forma puntual».

El gran caudal de agua afecta a barrios costeros, como La Vuelta del Paraguayo, que desde hace semanas sufre las consecuencias. En ese escenario, la situación empeora día a día. Por otro lado, la gran vegetación que acompaña la crecida, con predominio de camalotes, afectaron las tomas de agua que Assa posee sobre el espejo de agua.

La semana pasada, San Javier tuvo serios inconvenientes con el servicio de agua potable por la misma situación, la cantidad de vegetación sobre el río que afectaron la toma de agua. En esa ciudad costera debieron suspender las clases.

Los pilotes del Puente Colgante, referencia ante cada crecida del Paraná, están a punto de quedar bajo agua. Mucha de la vegetación queda amarrada en las bases que sostienen al viaducto.

En tanto, el embalsado a la altura de los pilotes del viejo puente ferroviario amenaza con volver a armarse y a partir nuevamente la Setúbal en dos.